Última actualización 5 noviembre, 2019
Catar un vino es sencillamente analizar las propiedades físicas del vino. Se puede saber la calidad del mismo, textura, olor y sabor determinando de esa manera la calidad del vino catado.
Los catadores , gente que se especializa en catar, deben gozar de buena salud, no deben fumar ni usar perfumes fuertes en el momento de la cata y lógicamente no deben tener problemas respiratorios ya que los factores enumerados influyen en los resultados de la cata. Todo se basa en que en la cata o degustación de vinos se utiliza no solo el paladar para degustar sino que también el olfato y la vista.
También las copas en que se cata el vino deben tener ciertas caracyterísticas, deben ser transparentes e incoloras. La copa de cata profesional tiene ciertas medidas y grosor determinados. Actualmente se está utilizando mucho la copaa oenologue en las cuales se puede introducir a la vez boca y nariz.
Los catadores siempre puntúan a los vinos, pero generalmente para turistas que visitan a bodegas, la cata se hace simplemente para degustar un buen vino.
La cata de vinos posee tres fases fundamentales basadas en los sentidos de la vista, olfato y oído. El sentido del tacto también interviene por medio de la lengua que nos transmite la densidad, la temperatura y los gases carbónicos. Hay varios tipos de cata, la vertical, la horizontal y la ciega, donde se prueban vinos sin conocer información ni procedencia.